La población de las Islas Canarias han tenido épocas de mucha emigración, debido a la falta de oportunidades de antaño en el archipiélago. En Garachico se construyó un monumento en honor de esas personas que abandonaron la isla en busca de mejores oportunidades o con la intención de irse para volver e iniciar sus propios negocios.. En 1990 fue inaugurado el llamado como Mirador el Emigrante para homenajear a las personas que salieron de la isla con la intención de tener un mejor trabajo y mejores perspectivas de futuro. La iniciativa surge de la asociación Chicharros Mensajeros.

El Mirador El Emigrante está situado en el Risco Partido, dentro del término municipal de Garachico y en él hay un monumento creado por el artista Fernando Ramos, es una figura humana realizada en bronce de unos dos metros de alto que se encuentra sobre una base de piedra, también de unos 2 metros y con una lápida que hace referencia a la emigración.

Desde el mirador se puede divisar una panorámica de la población ,y es posible observar claramente las dos lenguas de lava de la erupción del volcán Arena Negra en 1706.

En la parte sur de la isla, en Granadilla de Abona se encuentra un paraje natural de costa llamado Reserva Natural Especial de Montaña Roja. Este espacio único es perfectamente reconocible, en una zona de costa poca escarpada y dominado por un terreno llano se divisa una impresionante colina roja. 166 hectáreas de arenas inorgánicas y de humedales donde se pueden divisar algunas aves protegidas, como el chorlitejo patinegro pero también otras como el zarapito, correlimos, o archibebes y muchos más. También hay una fauna de invertebrados bastante rica, muchos de ellos endémicos.

La flora de la zona también a pesar del paraje también es rica, se encuentran hasta 136 especies de plantas, algunas de ellas se encuentran amenazadas. Destaca el balancón, las lechetreznas, melera o treintanudos. El volcán de la montaña roja tiene una altitud de 171 metros y se formó tras una erupción en el litoral que se unió a la isla por una serie de materiales volcánicos.

Cabe destacar también que la Montaña Roja está rodedada de cierto aire de leyenda, es uno de los lugares donde, según testimonios se han divisado objetos que expertos ufólogos consideran que puden ser OVNIS.

Además del interés pasajístico que regala esa parte de Granadilla de Abona, también se puede disfrutar de un excelente baño en la zona, donde se encuentra la playa de La Tejita.

El Mirador de Chipeque no es solo un lugar reservado para los residentes en Tenerife, sino que los visitantes tienen en este lugar uno de los puntos con las vistas más bellas de toda la isla. Chipeque se encuentra cercano a otros miradores como el de La Tarta I y II o el mirador Montaña de Limón.

La forma más rápida de llegar es a través de la carretera de La Esperanza que da acceso al Parque Nacional de Las Cañadas del Teide o bajando desde el Teide.

Desde el mirador se divisa parte de la vertiente norte de Tenerife, en territorio de Santa Úrsula, desde Punta del Hidalgo hasta Buenavista pasando por el Valle de la Orotava por supuesto todo bajo la mirada del imponente Teide. En los días claros se puede ver perfectamente la isla de La Palma y cuando no el mar de nubes.

El entorno natural del Mirador de Chipeque está dominado por el pino canario y está situado en plena dorsal de La Esperanza que recibe el nombre de Paisaje Protegido de Las Lagunetas.

En la población de Santa Úrsula no podía faltar un rincón en el que disfrutar de unas espectaculares vistas y relajarse, el Mirador de la Quinta es el lugar idóneo para poder llevar ello. El mirador se encuentra situado en la zona conocida con el nombre de Barranco de la Fortuna al final de la urbanización de La Quinta y está registrado en la Red de Miradores del Cabildo de Tenerife como de interés paisajístico.

Desde el Mirador de la Quinta se tiene una impresionante vista de toda la linea de costa del Valle de la Orotava hasta el Puerto de la Cruz y una vista suprema del Teide.

En la carretera general que une Tamaimo con Puerto de Santiago se encuentra el Mirador de Archipenque, uno de los más espectaculares de esta parte de la isla de Tenerife. El mirador pertenece a la Red Insular de Miradores y desde él se puede tener una de las vistas más espectaculares de los imponentes Acantilados de los Gigantes. La vista que ofrece este punto de Santiago del Teide también permite tener una bonita panorámica del puerto deportivo de Los Gigantes y divisar a lo lejos la vecina isla de La Gomera.

El mirador dispone también de paneles informativos donde es puede conocer que tipo de fauna marina es posible divisar en las aguas o la altura de los acantilados. También es posible adquirir un recuerdo en el pequeño bazar que hay en el mismo mirador. Un lugar de obligada parada.

Entre los lugares más bonitos que se puede visitar en El Sauzal está el Mirador de La Garañona. Este lugar privilegiado se encuentra en la parte superior del acantilado de El Sauzal y regala a todos los que la visiten una de las panorámicas más bellas de la zona norte de la isla de Tenerife.

No sólo las vistas son un reclamo para los visitantes también las zonas ajardinadas con multitud de platas autóctonas del archipiélago realzan el valor de este rincón.

Desde el Mirador de La Garañona se observa el Océano Atlántico en toda su inmensidad, pero también se obtiene una vista cenital de la Playa de la Garañona, también perteneciente al municipio de El Sauzal además de otros lugares como el núcleo costero de Mesa del Mar.

Se puede ver en su máximo esplendor las escarpada y accidentada costa de la isla, se puede observar que quedan restos del un antiguo elevador que data de mediados del siglo XX y que se utilizó para la extracción de arena de la playa, aunque no se utilizó mucho aun se conserva parte de la maquinaria.

El mirador cuenta con una superficie de 1500 metros cuadrados, rodeado de vegetación y sitios para descansar.

En la población de Los Realejos se encuentra uno de los miradores más visitados de la zona, recibe el nombre de Mirador de San Pedro. Situado en el noroeste del término municipal de la población en la parte norte de la isla de Tenerife.

Este mirador tan singular está enclavado en un entorno natural de los más singulares de las islas. Gracias a que el Mirador de San Pedro está situado a unos 200 metros sobre el nivel del mar se puede tener unas vistas impresionantes de los alrededores de Los Realejos.

Desde el propio mirador parten dos caminos uno que llega hasta la misma costa y que discurre por la conocida como Ermita de San Pedro, mientra que el segundo de los caminos, también hacia la costa pasa por la Hacienda de Castro hasta llegar la Fortín de San Fernando atravesando algunos de los palmerales más bellos de la isla.

El Mirador de Ayosa está situado en la isla de Tenerife, en pleno Parque Nacional de Las Cañadas a unos 2000 metros sobre el nivel del mar. Este mirador tan pintoresco se encuentra rodeado de naturaleza, especies como pino canario, rosalillos de la cumbre, chahorras o codesos es alguna de la vegetación que se puede encontrar.

El Mirador de Ayosa es un lugar perfecto para poder divisar el mar de nubes que a veces se sitúa a los pies del Teide, cuando no hay nubes se puede ver el espectacular Valle de la Orotava, los altos de Aguamansa, el macizo de Teno y a lo lejos la isla de La Palma. Además Ayosa es uno de los puntos de la isla donde mejores atardeceres se pueden admirar.