Situado al norte de la isla de Tenerife, San Juan de la Rambla es un municipio muy pequeño pero muy tranquilo, que creció en torno a la ermita de san Juan Bautista, levantada en el siglo XVI. Su nombre, "San Juan" se debe precisamente a la devoción a este santo, mientras que "de la Rambla" se lo debe a su crecimiento escalonado hacia el mar lo que ha propiciado que hoy día el pueblo esté dividido en dos núcleos, San Juan por un lado y La Rambla por otro.
Aunque este municipio es apreciado por su entorno natural y el turismo rural en torno al Paisaje Protegido Los Campeches, Tigaiga y Ruiz, lo cierto es que destacan las zonas de playa, y en especial el Charco de las Lajas y la Playa de las Aguas. En cuanto a su patrimonio destaca la visita a su blanca plaza principal en la que resalta la mencionada Iglesia de San Juan Bautista, pero también las antiguas casas de la Alhóndiga, la de los Alonso del Castillo, la de los Oramas. También hay que visitar el barrio de los Quevedos, declarado Bien de Interés Cultural, y el Molino de Gofio del Risco de las Pencas o Molino de Ruiz.
Ésta es una ruta que lleva por los lugares más misteriosos de Tenerife. Lugares que cuentan leyendas pasadas que permanecen en la memoria canaria desde tiempos pasados, de antiguas tradiciones, o que encierran sucesos difícilmente explicables. Historias de fantasmas, de apariciones marianas, de luces extrañas o de avistamiento de OVNIS...
El origen volcánico del archipiélago canario hace que gran parte de la costa de la isla sea muy accidentada y que cree curiosas formas que dan lugar a piscinas naturales que sirven para disfrutar de las aguas del Atlántico. Esta ruta de piscinas naturales ofrece las más interesantes de Tenerife.
El Atlántico deja frecuentes lagunas en la costa canaria formando auténticas piscinas naturales, ideales para bañarse en aguas tranquilas junto a un mar generalmente bravío. Éstas son las principales piscinas naturales que hay repartidas por las Islas Canarias.