Antigua

La Iglesia Nuestra Señora, es un templo cristiano en el término municipal de Antigua, isla de Fuerteventura, Canarias.

Se sabe que se empezaron a construir molinos en la isla de Fuerteventura en el siglo XVIII, actualmente se han conservado muchos, concretamente en la población de Antigua está uno de los más interesantes y que se puede visitar. La conservación de los molinos son un homenaje al legado de la cultura tradicional en la isla, es realzar la importancia que este tipo de construcciones supuso para el desarrollo de la población que habitaba estos parajes.En Fuerteventura predominaba principalmente la agricultura de secano, los cereales como el trigo y la cebada eran la piedra angular sobre la cual se sostenía el sector, tal era la importancia de los cultivos que la isla era considerada el granero de Canarias. Las cosechas que se recolectaban en Fuerteventura abastecían a otras islas, como es el caso de Tenerife, Gran Canaria y La Palma.Antigua disponía de grandes extensiones dedicado al cultivo de cereal de manera que gran parte de la producción era exportardo a otros puntos del archipiélago. Para moler este grano se construyeron molinos como el de Antigua y que hoy se conservan con todo lujo de detalles.Esta construcción está realizada con fuertes muros de mampostería, divididos en tres plantas y cuatro aspas, siendo el techo del molino de forma cónica. El Molino de Antigua está totalmente restaurado, en la tercera planta se puede ver la rueda dentada que hace girar las aspas por la fuerza del viento. Las aspas se encuentran perfectamente orientadas para que los vientos alisios hicieran girar el rotor, incluso se podía girar el tejado cónico para orientarlos a otros vientos. Mientras la planta inferior era utilizada para guardar los utensilios y herramientas de trabajo.Actualmente el molino pertenece a la Red de Centros y Museos del Cabildo de Fuerteventura y también alberga las instalaciones de el Museo del Queso con su propia tienda donde poder adquirir diferentes tipos de estos manjares.

Ocupando parte del término municipal de Antigua está el Monumento Natural de la Caldera de Gairía. Este entorno natural forma parte de la cuenca hidrográfica cerrada de Agua de Bueyes y tiene unas dimensiones que superan las 240 hectáreas, formando parte tanto de Antigua como la localidad de Tuineje. El Monumento Natural de la Caldera de Gairía está en un excelente estado de conservación y tiene un gran interés tanto geológico como paisajístico y geomorfológico.Gairía está situada en un espectacular campo de lava y piroclastos que se ubica en la Depresión Central que constituye Malpaís, se pueden divisar diferentes edificios volcánicos: Caldera de Gairía, seguido por la Caldera de La Laguna un tercero que es la Caldera de Liria y por último está la Caldera de Arrabales. El que más destaca de los cuatro es sin duda la Caldera de Gairía con una altitud de 461 metros y que sobresale de una zona bastante llana. Gracias a su situación en una zona llana, el cono se imponte señorial como hito paisajístico y se puede ver desde numerosos puntos. Las lenguas de lava se ven perfectamente y como estás están orientadas hacia la Depresión Central separadas de las coladas que se emitieron tanto desde la Caldera de Liria como la de La Laguna (que son las que forman Malpais Grande). Todo el entorno de la Caldera de Gairía, conocido con el nombre de Malpais chico, se abre hacía la parte sureste y tiene partido su flanco occidental debido a las extracciones de áridos picón. Gairía está declarado Espacio Natural de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional y más tarde fue considerado Monumento Nacional. Con respecto a la Flora se puede encontrar tabaibal dulce, algohuera, el espino la rama o la aulaga, mientras, con respecto a la fauna, se pueden divisar guirres, alimoches o la presencia ocasional de la gangas ortega.

En Antigua también es posible conocer con todo lujo de detalles como se obtiene la sal marina. El Museo de la Sal está situado en lo que antaño fueron las salinas de Antigua, que se inauguraron a principios del siglo XX, es el sitio está destinado a enseñar todo el proceso de obtención de la sal marina.El Museo de la Sal está ubicado en un moderno edificio de reciente construcción, se encuentra dividido en 2 partes: La primera parte está situada dentro de las instalaciones del edificio y mediante proyecciones audiovisuales se explica todo el proceso de elaboración de la sal desde sus inicios hasta que la sal se vende al cliente final. La segunda parte del museo de la sal, que está en los aledaños del edifico, se encuentran las salinas a pleno funcionamiento y es posible ver como se obtiene.Después de conocer todos los secretos de la extracción de la sal, es posible recorrer las salinas y observar in situ como es el proceso que se lleva a cabo para poder obtener la sal que finalmente los usuarios consumen. La visita al Museo de la Sal se convierte en una interesante experiencia didáctica, se pude ver desde como se recoge el agua de mar en los saltaderos, hasta como tras la evaporación del agua queda la sal en los cocederos. La visita está supervisada por guías del propio museo que ayudarán a resolver cualquier tipo de duda durante el proceso.El museo se completa con un bar y una tienda donde poder obtener recuerdos de la visita y donde es posible adquirir sal de la calidad que producen las salinas. El valor tanto etnográfico, como arquitectónico, natural, cultural y paisajístico es sumamente importante, las salinas y todo su entorno son lugares perfectos para el turismo y para enseñar a los visitantes la importancia de de este lugar.

A pocos minutos de Antigua y del aeropuerto de Fuerteventurase se encuentra la Caleta de Fuste, una zona de playas tranquila en la parte este de la isla, resguardada del frío y de las inclemencias del viento y de excelentes aguas. Gracias a la ensenada natural que protege la Caleta de Fuste, este rincón que pertenece a Antigua es perfecto para disfrutar de días de playa en un paraje de aguas tranquilas y fina arena.La Caleta de Fuste ofrece los mejores lugares comerciales y de ocio de la isla de Fuerteventura, no solo ofrece a los visitantes unas maravillosas playas, sino que la existencia de centros comerciales y locales hará que la diversión no acabe cuando caiga la noche.Además de la oferte diurno de sol y playa de la Caleta de Fuste, también existen cines, centros comerciales, bares, restaurantes, campos de golf, complejos hoteleros de primer nivel, tiendas y otros lugares que convierten la zona en una de las más concurridas de Fuerteventura.Los amantes de los deportes acuáticos también están de suerte, la Caleta de Fuste ofrece la posibilidad de practicar en la Playa del Castillo, alquiler de canoas, clases de windsurf, escuela de buceo, motos de agua y un largo etcétera de actividades para todos los públicos. La Caleta de Fuste ofrece 4 playas artificiales que están protegidas por unos arrecifes, también dispone de puerto deportivo con accesos peatonales.En las inmediaciones también se puede visitar el Castillo de Buenaventura que data del siglo XVIII o las antiguas salinas donde es posible ver el Museo de la Sal.En definitiva La Caleta de Fuste es el lugar idóneo en Fuerteventura para pasar días de playa perfectos, en arenas finas y aguas azules y transparentes. Además hay que añadir la amplísima oferta de ocio y la buena comunicación de esta zona con el resto de la isla.

El poblado de la Atalayita está situado en la localidad de Antigua en la isla de Fuerteventura. Esta zona arqueológica se halla dentro del Valle de Pozo Negro y tiene un importante valor debido a que en este poblado se asentaron hace siglos los primeros pobladores aborígenes de Fuerteventura y que tenían el nombre de Mahos.El poblado de la Atalayita ocupa unas dimensiones que rondan 45,000 metros cuadrados formados por unas 115 estructuras de diferentes tipologías. Por un lado están las deconstrucciones de piedra seca, estas son pequeñas y su forma es troncocónica de planta circular o elíptica con una altura escasa. En segundo lugar están otras edificaciones mayores, también son de piedra seca pero la planta es un poco más compleja que las otras, se encuentran divididas en el interior por paredes de piedra, estas construcciones estaban techadas por vegetales que lógicamente no se conservan. Además de estas construcciones el Poblado la Atalayita y su entorno ofrece mucho material arqueológico que realza aún más la importancia del antigua asentamiento, fundamentalmente se pueden ver fragmentos cerámicos de piezas aborígenes, restos óseos, herramientas o útiles entres otros. La Atalayita recibe este nombre porque existe un promontorio, que es una elevación del terreno que permitía vigilar desde una altura el paraje y así alertar de posibles peligros. El poblado de la Atalayita estuvo destinado en sus orígenes al pastoreo libre de animales, alguno de los asentamientos aborígenes permanecieron durante algunas generaciones en fue utilizado como refugio ante posibles ataques. Los Mahos tenían un estilo de vida que trascurría al aire libre, pero aquí realizaron estas construcciones para resguardar el ganado y refugiarse por las noches para evitar las inclemencias del tiempo aunque también se cree que se utilizaba como escondite ante posibles ataques.

Muy cerca al centro urbano de Antigua se encuentra un maravilloso paraje llamado Pozo Negro. Uno de esos puntos alejados de los núcleos turísticos repletos de magia y encanto, lugar perfecto para desconectar por completo y no verse agobiado por las masificaciones. Pozo Negro es un poblado pesquero que históricamente se ha dedicado a la pesca de bajura y a la ganadería caprina principalmente, con una ensenada natural que durante el siglo XV fue uno de los principales puerto de la isla. La playa es de apenas 300 metros de longitud y la anchura es variable pero ronda los 12 metros, cercano, a apenas 2 kilómetros se encuentra el antiguo poblado aborigen de La Atalaya.La playa tiene una baja ocupación durante todo el año, es un poco ventosa y tiene un oleaje moderado, lo mejor que ofrece esta pequeña playa es la tranquilidad y la paz que se respira en toda la zona.La playa no es lo único que ofrece Pozo Negro, por los alrededores hay otros puntos de mucho interés y valor, uno de ellos es el poblado aborigen de La Atalayita. Este punto es uno de los más importante de Fuerteventura, fue un poblado habitado por los majos, que eran los nativos de la isla hasta la llegada de los conquistadores. Dando un pequeño paseo por los alrededores se puede visitar una gambuesa (una construcción para guardar el ganado de costa y que se encontraban en las zonas montañosas de la zona) o los pozos en los que poder disfrutar de baños magníficos.El puerto de Pozo Negro fue utilizado como lugar de llegada de algunas de las expediciones a Barberia cuyo objetivo era rescatar a los canarios que se hallaban cautivos en África. En la zona de Pozo Negro hay un par de restaurantes donde poder tomar cualquier tentempié.

En plena Costa de Antigua se encuentra uno de los lugares más interesantes de Fuerteventrua, el conocido como Yacimiento paleontológico de La Guirra. Este lugar de especial interés está situado en la caleta del mismo nombre, entre las Salinas del Carmen y los Hornos de La Guirra. En el Yacimiento de La Guirra ofrece depósitos marinos desde el pleistoceno y se han llegado a catalogar hasta 37 especies diferentes de fósiles marinos. El Yacimiento Paleontológico de la Guirra tienen 3 zonas muy diferenciadas, de estas dos de ellas corresponden a la edad pleistocena del último interglaciar con una edad que ronda entre los 135,000 y los 75,000 años y la tercera del Holoceno, de la glaciación más reciente con una edad aproximada de 3,550 años.El yacimiento tiene una superficie de unos 92,000 metros cuadrados y en 2005 fue declarado como Bien de Interés Cultura. Una de las joyas más importantes que tienen la isla de Fuerteventura y que da una idea del valor arqueológico que tiene la zona de Antigua.

Spa del hotel Sheraton Fuerteventura Beach Golf, Resort & Spa, situado en Avda. de las Marismas, en Antigua, Fuerteventura. Wellness Center con más de 1.000 metros cuadrados con tratamientos de belleza, terapéuticos y de relajación.