La playa virgen más famosa de Fuerteventura es la Playa de Cofete, lo primero que llama la atención de esta impresionante playa son sus dimensiones de unos 12 kilómetros de largo y la naturaleza salvaje que tiene todo el entorno.
La playa en si es una extensión de unos 12 kilómetros de longitud de arena clara y fina y junto a ellos el Macizo Montañoso de Jandía, las zonas más altas de Fuerteventura, y que protege la playa por la parte este de lo conocido como el Islote, que es una pequeña isla unida a la playa. También se encuentra el Roque del Moro que es una imponente roca que surge del mar, entre otros puntos como Casa de los Winter o el poblado de Cofete.
Gracias a su naturaleza salvaje, su tranquilidad y al no estar masificada es considerada una de las mejores playas de Europa. En la zona se encuentra el Caserío de Cofete en pleno parque natural de Jandia por lo que prácticamente esta despoblado durante todo el año.
Al encontrarse en uno de los lugares más espectaculares de Fuerteventura se han recuperado algunos espacios de interés turístico como: el mirador de Cofete, las antiguas casas de piedra seca, las gavias o el islote de Cofete.
Dentro del término municipal de La Oliva en la isla de Fuerteventura se sitúa una encantadora playa poco conocida que recibe el nombre de Playa del Chinchorro. Esta playa está al sur de El Jablito y en la zona denominada Barranco de Cavero.
Chinchorro está al final de la Zona Arqueológica del Barranco de Cavadero, donde se pueden observar una serie de inscripciones en bloques de basálticos en las paredes del cauce del barranco
La Playa del Chinchorro está muy cerca de la zona conocida como Parque del Holandes y cerca de la Playa de Jablito
Aguas turquesas. Arena dorada. Paraíso canario. La playa de Costa Calma es ese lugar simbólico que todos buscan en Fuerteventura. El de kilómetros de arena fina donde pasear y relajarse, donde poder tomar un cálido baño cuando apetece, apartado del mundo urbano.
La playa de Costa Calma se encuentra cerca de La Lajita, al sur de la isla. 1,3 kilómetros de extensión y una anchura media de 50/60 metros, protegida eso sí por los hoteles que se van salpicando no muy lejos del mar. Tranquila en días de intenso sol, pero ideal para practicar el surf y el windsurf cuando el viento arrecia. Unida, además, por su parte norte, con otras dos playas más pequeñas a las que se puede acceder con la marea baja.
Servicios con los que cuenta: aparte de la nutrida oferta de hoteles, tiene un centro comercial cercano, un parque acuático, restaurantes, y un buen servicio de hamacas de playa, aseos y duchas.
Puerto del Rosario tiene una de la playas más bonitas y encantadoras de Fuerteventura, Playa Blanca. A unos minutos de la capital de la isla no sólo es una buena opción para los habitantes de la ciudad, también es un destino interesante para los visitantes puesto que no es una playa masificada por el turismo. Un lugar tranquilo, con aguas limpias y transparentes, arenas blancas y finas y amplio espacio donde tender la toalla, con una anchura que supera los 40 metros por casi 1 kilómetro de largo.
Playa Blanca fue remodelada en 2008, se procedió a la sujeción de dunas, cambio de mobiliario, mejora de accesos y otras actuaciones que convirtieron a la playa en una de las mejores de Fuerteventura. Esta remodelación le ha servido a la playa para obtener en varias ocasiones el distintivo de Bandera Azul.
La playa ofrece numerosos servicios de atención para los visitantes, dispone de pasarela de madera para acceder hasta la arena, duchas adaptadas con lavapies, aseos adaptados, parque infantil, base de salvamento con socorristas durante la temporada de servicio, hamacas, sombrillas, amplio aparcamiento y un largo etcétera de equipamiento para uso y disfrute de los usuarios.
Playa Blanca no sólo está destinada para bañistas o amantes del mar que quieran disfrutar de un tranquilo día de playa, los aficionados a los deportes acuáticos como kitesurf, surf, windsurf y otras actividades deportivas pueden disfrutar de la amplia oferta. Se organizan torneos de Fútbol Playa, Balonmano Playa, Voley playa además de regatas de vela, travesías a nado entre la cercana Playa Chica y un largo etcétera de actividades destinada para todos los públicos.
El oleaje no suele ser muy fuerte, pero al no tener barreras de protección hay días en los que hay que tener precaución con el baño para evitar cualquier contratiempo.
Muy cerca al centro urbano de Antigua se encuentra un maravilloso paraje llamado Pozo Negro. Uno de esos puntos alejados de los núcleos turísticos repletos de magia y encanto, lugar perfecto para desconectar por completo y no verse agobiado por las masificaciones. Pozo Negro es un poblado pesquero que históricamente se ha dedicado a la pesca de bajura y a la ganadería caprina principalmente, con una ensenada natural que durante el siglo XV fue uno de los principales puerto de la isla. La playa es de apenas 300 metros de longitud y la anchura es variable pero ronda los 12 metros, cercano, a apenas 2 kilómetros se encuentra el antiguo poblado aborigen de La Atalaya.
La playa tiene una baja ocupación durante todo el año, es un poco ventosa y tiene un oleaje moderado, lo mejor que ofrece esta pequeña playa es la tranquilidad y la paz que se respira en toda la zona.
La playa no es lo único que ofrece Pozo Negro, por los alrededores hay otros puntos de mucho interés y valor, uno de ellos es el poblado aborigen de La Atalayita. Este punto es uno de los más importante de Fuerteventura, fue un poblado habitado por los majos, que eran los nativos de la isla hasta la llegada de los conquistadores. Dando un pequeño paseo por los alrededores se puede visitar una gambuesa (una construcción para guardar el ganado de costa y que se encontraban en las zonas montañosas de la zona) o los pozos en los que poder disfrutar de baños magníficos.
El puerto de Pozo Negro fue utilizado como lugar de llegada de algunas de las expediciones a Barberia cuyo objetivo era rescatar a los canarios que se hallaban cautivos en África. En la zona de Pozo Negro hay un par de restaurantes donde poder tomar cualquier tentempié.