Situado en la parte norte de la isla de Fuerteventura, en Villaverde, un pueblo perteneciente a La Oliva se encuentra la Cueva del Llano. Se calcula que este espacio natural tiene más de un millón de años, siendo uno de los tubos volcánicos más antiguos del archipiélago canario.
Según los expertos La Cueva del Llano se formó tras la erupción del volcán de la Montaña Escanfraga. La cueva es un tubo de lava que cuenta con una longitud aproximada 650 metros, de los cuales se puede recorrer unos 400 metros puesto que los 200 restantes están cubiertos de sedimentos.
La Cueva del Llano ha tenido muchos usos a lo largo de su historia, ha servido como polvorín, almacén o para guardar el ganado. Tras muchos años de abandono y después de que su ecosistema se viera amenazado se realizaron una serie de mejoras para adaptar la cueva a las visitas turísticas, también se creo un centro de visitantes donde poder recibir información sobre su formación.
Dentro de la Cueva del Llano hay una fauna cavernícola peculiar, lo habitan artrópodos, como el pececillo de plata o un tipo de aracnido llamado opilión. Un lugar de obligada visita.
Entre los espacios protegidos de Fuerteventura más impresionantes está el Monumento Natural del Malpaís de la Arena, Volcán de la Arena. Situado entre La Oliva, Lajares y Villaverde este paraje transportará a los visitantes a otro planeta gracias a los imponentes parajes de roca que los rodea. Esta zona se formó a raíz de un volcán que tras su erupción dejó un mar de lavas solidificadas y que dio lugar a un ecosistema único de flora y fauna que se une además al gran valor geológico, geomorfológico y arqueológico.
Malpaís tiene unas dimensiones que rondan los 12 kilómetros cuadrados y están formado por varios cráteres y salideros de lava en la base del edificio principal del volcán. El Volcan de La Arena tiene una edad de 10,000 años tiene una altura de 420 metros sobre el nivel del mar y 120 sombre la base y es considerado el más joven de la isla de Fuerteventura.
En Malpaís se puede ver pequeños hornos, unos huecos por done se liberaban los gases de las erupciones volcánicas, esto ha provocado que se formasen cuevas como la que recibe el nombre de La de Los Picos, la del Diablo o la cueva de las Burras. Se puden observar aves como lechuzas o pardelas que se refugian en época de reproducción.
En 1970 se encontró el yacimiento arqueológico de la Cueva de los Ídolos, en el se hallaron gran cantidad de cerámica fragmentada, restos óseos, raspas de pescados, herramientas, objetos de decoración y los ídolos que son pequeñas piezas de barro y piedras que aparecieron entre objetos domésticos en túmulos funerarios. La gran cantidad de objetos encontrados unido a su paisaje y otros elementos han hecho este espacio fuese declarado en 1987 como Paraje Natural de Interés Nacional de Malpaís Grande y reclasificado en 1994 de Espacios Naturales de Canarias como Monumento Nacional.
Ocupando parte del término municipal de Antigua está el Monumento Natural de la Caldera de Gairía. Este entorno natural forma parte de la cuenca hidrográfica cerrada de Agua de Bueyes y tiene unas dimensiones que superan las 240 hectáreas, formando parte tanto de Antigua como la localidad de Tuineje. El Monumento Natural de la Caldera de Gairía está en un excelente estado de conservación y tiene un gran interés tanto geológico como paisajístico y geomorfológico.
Gairía está situada en un espectacular campo de lava y piroclastos que se ubica en la Depresión Central que constituye Malpaís, se pueden divisar diferentes edificios volcánicos: Caldera de Gairía, seguido por la Caldera de La Laguna un tercero que es la Caldera de Liria y por último está la Caldera de Arrabales.
El que más destaca de los cuatro es sin duda la Caldera de Gairía con una altitud de 461 metros y que sobresale de una zona bastante llana. Gracias a su situación en una zona llana, el cono se imponte señorial como hito paisajístico y se puede ver desde numerosos puntos. Las lenguas de lava se ven perfectamente y como estás están orientadas hacia la Depresión Central separadas de las coladas que se emitieron tanto desde la Caldera de Liria como la de La Laguna (que son las que forman Malpais Grande). Todo el entorno de la Caldera de Gairía, conocido con el nombre de Malpais chico, se abre hacía la parte sureste y tiene partido su flanco occidental debido a las extracciones de áridos picón.
Gairía está declarado Espacio Natural de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional y más tarde fue considerado Monumento Nacional. Con respecto a la Flora se puede encontrar tabaibal dulce, algohuera, el espino la rama o la aulaga, mientras, con respecto a la fauna, se pueden divisar guirres, alimoches o la presencia ocasional de la gangas ortega.
Situada al noreste de la Fuerteventura está el conocidos Islote de Lobos o isla de Lobos. Esta pequeña isla está situada en el estrecho de la Bacaina, cuenta como pedanía del municipio de La Oliva.
La Isla de Lobos tiene apenas unos 6 Kilómetros cuadrados y unos 13,7 kilómetros de costa, a a penas 2 kilómetros de Fuerteventura y a unos 8 de Lanzarote. Desde la playa de Corralejo se puede ver nítidamente el cercana islote, el canal que separa ambas islas se conoce con el nombre de El Río o Paso de la Orchilla y no tiene una profundidad que excede los 10 metros. La máxima altura de la pequeña isla es La Caldera, que llega hasta los 127 metros de altitud.
La isla debe su nombre a que hace años se situaban en la isla algunas colonias de focas monje o fraile del mediterráneo (lobos marinos). Toda la isla se encuentra protegida y tiene el nombre de Parque Natural del Islote de Lobos, tiene unas 130 especies vegetales y varios tipos de aves como la gaviota argénta, la avutarda y la pardela cenicienta. Sin duda uno de los tesoros de la isla son los fondos marinos, que muchos aficionados al submarinismo pueden disfrutar.
Fuerteventura dispone de una gran cantidad de espacios naturales, uno de los más conocidos pertenece al municipio de La Oliva, a apenas 6 kilómetros de la costa atlántica, está la Montaña de Tindaya.
Esta formación montañosa está en el Llano de Esquinzo y alcanza una cota cercana a los 400 metros siendo considerado el elemento natural más emblemático de Fuerteventura.
Hablando de su morfología Tindaya es un pitón traquítico en forma piramidal, se muestra imponente a la vez que solitaria en los llanos de Esquinzo muy cercana al pueblo del mismo nombre y en la parte noroeste de Fuerteventura.
Se cree que la Montaña de Tindaya se formó hace aproximadamente 18,7 millones de años y según estudios puede ser una de las primeras formaciones que surgieron en la isla, en el gran edificio del escudo Tetir. Este escudo de origen volcánico fue fruto de la erosión a lo largo de cientos de millones de años que fueron desgastando las rocas basálticas de las que estaban formadas, aflorando así las rocas cuarzo-traquíticas que resistieron esa erosión a lo lardo de milenios y lo que hoy es Tindaya.
En la base de la montaña se encuentran pequeñas canteras que actualmente están en desuso que fue explotada hace algún tiempo por empresas privadas.
A pesar de parecer un paraje desértico existe una flora y fauna muy curiosa. Con respecto al flora, hay especies endémicas de Canarias, destaca por ejemplo la cuernúa o el Jarao. Con respecto a la fauna destacan las aves, como el alcarava, el corredor sahariano, perdiz moruna o el camachuelo trompetero entre otros. En zonas más escarpadas está el cernícalo común, el cuervo canario o el guirre majonero.
A la montaña de Tindaya siempre la ha rodeado un halo de magia, es una zona de alto valor arqueológico y se han hallado vestigios de la celebración de ritos mágicos o religiosos. Muy cercano está la Cueva del Bailadero de las Brujas o las Cuevas de las Bailaderos de Los Pastores.
El Parque Rural de Betancuria tiene una extensión de 16,500 hectáreas y coge terreno de 5 municipios de la isla de Fuertevetura, además de la propia Betancuria, se encuentra: Antigua, Pájara, Tuineje y la capital Puerto del Rosario. Este paraje natural está situado en el sector centro-occidental de la isla y dentro se halla el Monumento Natural de Ajuy.
Este parque rural es un inmenso terreno árido y con toques semidesérticos de orografía accidentada. El paraje destaca por los impresionantes tonos cobrizos y ocres que dan a los barrancos y escarpes montañosos una belleza árida simplemente espectaculares a esto se une el importante valor geomorfológico y etnogŕáfico de la zona natural.
Dentro del Parque Rural de Betancuria se encuentran varias montañas de media y baja altura, estas son el Morro Jana de 764 metros, la Gran Montaña de 708 metros, el Morro de la Cruz con 676 metros o el Morro de Velosa que cuenta con una altura de 669 metros y que alberga un mirador desde el cual se puede divisar parte del paraje. El parque rural también alberga el Monumento Natural de Ajuy que es un depósito con un incalculable valor geológico con fósiles de animales extinguidos y sedimentos marinos.
El parque ofrece también otros elementos como la presa de Las Peñitas, que contrasta fuertemente con el carácter árido de toda la zona, también está el mirador de Guise y Ayose que reciben el nombre de los dos antiguos caudillos majoneros.
Con respecto a la vegetación del Parque Rural de Betancuria es escasa pero puede verse matorral, salpicados por algunos tamarindos, tabaidas o palmeras. La fauna está dominada por las aves y es posible divisar águilas pescadoras, cernícalos, pardelas o herrerillos.
Los amantes del senderismo puede realizar rutas por los diferentes senderos señalizados que se extienden por el paraje y que permiten llegar a los distintos puntos de interés que hay por la zona.
Fuerteventura cuenta con un gran número de calderas que dan buena fe del origen volcánico de la isla y de todo el archipiélago. Una de ellas se sitúa en el término municipal de Tuineje y es la Caldera de Arrabales, que se encuentra rodeado de conos volcánicos que representan el vulcanismo más reciente de la isla, como por ejemplo la Caldera de Gairia, o las de La Laguna o Liria todas ellas vinculadas al Monumento Natural de Malpaís Grande.
Esta zona es muy conocida por la cantidad de senderos destinado a los amantes del senderismo, una de las más concurridas finaliza en la Caldera de Arrabales, tras recorrer tres conos volcánicos.
La zona es característica por su paisaje agreste, de tonos ocres, compuesta por un tipo de flora dominada por matorral muy disperso en llanos estepáricos, con respecto a la fauna si ofrece mayor diversidad, es posible divisar aves como el guirre que dominan toda la zona del llano de Tiscamanita. También se puede encontrar comederos para alimoches majoreros cercano a la Caldera de Arrabales y otras especies, especialmente aves.
La Caldera de Arrabales se eleva sobre el llano con 245 metros y con una profundidad que supera los 100 metros
Muy cerca al centro urbano de Antigua se encuentra un maravilloso paraje llamado Pozo Negro. Uno de esos puntos alejados de los núcleos turísticos repletos de magia y encanto, lugar perfecto para desconectar por completo y no verse agobiado por las masificaciones. Pozo Negro es un poblado pesquero que históricamente se ha dedicado a la pesca de bajura y a la ganadería caprina principalmente, con una ensenada natural que durante el siglo XV fue uno de los principales puerto de la isla. La playa es de apenas 300 metros de longitud y la anchura es variable pero ronda los 12 metros, cercano, a apenas 2 kilómetros se encuentra el antiguo poblado aborigen de La Atalaya.
La playa tiene una baja ocupación durante todo el año, es un poco ventosa y tiene un oleaje moderado, lo mejor que ofrece esta pequeña playa es la tranquilidad y la paz que se respira en toda la zona.
La playa no es lo único que ofrece Pozo Negro, por los alrededores hay otros puntos de mucho interés y valor, uno de ellos es el poblado aborigen de La Atalayita. Este punto es uno de los más importante de Fuerteventura, fue un poblado habitado por los majos, que eran los nativos de la isla hasta la llegada de los conquistadores. Dando un pequeño paseo por los alrededores se puede visitar una gambuesa (una construcción para guardar el ganado de costa y que se encontraban en las zonas montañosas de la zona) o los pozos en los que poder disfrutar de baños magníficos.
El puerto de Pozo Negro fue utilizado como lugar de llegada de algunas de las expediciones a Barberia cuyo objetivo era rescatar a los canarios que se hallaban cautivos en África. En la zona de Pozo Negro hay un par de restaurantes donde poder tomar cualquier tentempié.