La Cueva de Don Justo está situada en la parte sur de la isla, algunos escritos la califican como “la cueva misteriosa”. Esta gruta está ubicada en un río de lava y ha sido objeto de numerosos estudios de expertos vulcanólogos.
La cueva es un tubo volcánico que se encuentra entre la Montaña de Hiramas y el pueblo pesquero de la Restringa, muy cercana a la Montaña de los Muertos y a no más de 100 metros de la carretera que une el Pinar y la Restringa.
Estos tubos volcánicos tienen más de 6 kilómetros y existen cruces y superposiciones de tubos dentro de la misma gruta. Según expertos estos tubos denotan que fueron originados por una erupción prolongada y junto con otros elementos dio lugar a un auténtico laberinto de galerías de difícil acceso y donde es no difícil perderse.
La única entrada accede a la parte superior de la cueva, tiene una longitud de 1,360 metros y un desnivel de 135 metros y finaliza cercana a la línea de Costa.
Debido a las condiciones excepcionales de su formación, la distribución laberíntica de la cueva da lugar a unos 6,500 metros de galerías.
La Cueva de don Justo es la tercera en longitud en las Islas Canarias, después de La Cueva del Viento en Tenerife y la Cueva de Los Verdes en Lanzarote.
Actualmente está restringido el acceso para proteger las especies endémicas situadas en su interior.